Los estudios de pre y post test publicitario permiten maximizar la eficacia de las campañas en el sector salud, evaluando su impacto tanto antes como después de su difusión.

El pre-test analiza si una pieza llama la atención, destaca frente a otros mensajes, se vincula correctamente con la marca y deja una impresión duradera. Además, detecta oportunidades de mejora en la creatividad y permite afinar el mensaje antes del lanzamiento.

El post-test, por su parte, mide el recuerdo real de la campaña, su grado de asociación con la marca, la respuesta generada y su efectividad frente a la competencia.

Ambas herramientas son clave para optimizar la inversión en comunicación, reducir riesgos y asegurar una mayor conexión con el público objetivo.